Los beneficios del cambio a una iluminación LED
son visibles desde el primer momento. Y en muchos casos su instalación es tan
simple como cambiar una bombilla por otra.
La eficiencia energética de las luminarias led
frente a los productos convencionales es absolutamente imbatible. No sólo precisan
un consumo energético muy inferior, sino que disfrutan de una duración entre
5 y 10 veces superior a la vida media del resto de artículos.
La calidad de luz obtenida, tampoco es
comparable. Las luminarias LED, al contrario que las bombillas o fluorescentes
normales o de bajo consumo, consiguen inmediatamente la máxima claridad y
potencia. No se ven afectadas por la frecuencia de encendidos y apagados
habituales. Además funcionan a temperaturas notablemente más bajas, evitando
las molestias y costes añadidos que supone el sobre-calentamiento en muchos
espacios iluminados.
Con respecto al color, es incomparable. Todas las
luces LED son de un color específico, que mantienen a lo largo de su vida útil.
Contra otras fuentes de luz, gran parte de la luz producida se compone de colores
no deseados que se filtran lo que supone un derroche de energía. Las luces LED
producen el color puro (luz monocromática) por lo que no requiere de
filtración.
Existen igualmente claras ventajas con respecto
al impacto medioambiental. Desde las sustancias utilizadas para su fabricación
(libres de mercurio o plomo), hasta la reducción de emisiones de CO2 asociadas,
contribuyen en gran medida a fomentar el desarrollo sostenible.
Las bombillas LED son menos sensibles a los
golpes, las vibraciones y los cambios extremos de temperatura que rápidamente
pueden arruinar una frágil bombilla halógena. Los fluorescentes se desgastan
mucho más rápido si están con frecuencia encendiéndose y se apagándose. Las
bombillas LED no se ven afectados por frecuentes sobre-apagado.
La
amortización de la inversión en iluminación led es muy rápida inferior en
muchos casos a los 22 meses, para un encendido medio de 2 horas diarias
considerando únicamente el consumo que repercute en la factura eléctrica.
El cambio a led, por tanto, se traduce en un importante e inmediato beneficio económico, cualitativo y medioambiental para particulares, empresas y organizaciones.
2 comentarios:
Comparto la opinión de que los beneficios del cambio de una iluminación a otra como es la iluminación LED son muy factible, visibles desde el primer momento en que se hace el cambio de un tipo de iluminación a otra, y su aceptación está en la eficiencia energética que nos proporciona el tipo de iluminación LED.
Hola Yanisbel:
Estoy completamente de acuerdo contigo en lo que comentas, me gustaría agregar que la iluminación LED parece ser el futuro, ya que cumple con las mejores cualidades en cuanto a durabilidad y bajo consumo eléctrico. Si a esto le sumamos lo que podemos leer en el artículo sobre la calidad de la luz, creo este tipo de iluminación es la más recomendada en nuestros días.
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